viernes, noviembre 02, 2018

Recuerdos en neblina

No tengo ni la mas remota idea qué generó que volviera a llegar a mi blog, seguramente alguna fotografía o video en facebook o estado anímico con la cual relacioné el escribir.

Y dan mas ganas en ese preciso momento en el que hay un silencio placentero, totalmente tranquilo.

Quizás también necesitaba este espacio en "papel" silencioso, aislado, neutral, que permita un grito de palabras.

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Hace poco una amiga colocó una frase que decía "qué creías en tu niñez que ahora te das cuenta que no era cierto?...y no logré responder esa pregunta, quizás por que por alguna razón no tengo casi recuerdos sociales de mi niñez, pienso en la niñez y viene a mi mente una puerta cerrada con una hoja pegada por detrás simulando un tablero de clase....jugaba sola, no me arrepiento, lo disfruté pero debe estar relacionado con el no recordar cosas sociales. Ahora soy psicóloga-docente y disfruto el enseñar, ya no propiamente en el aula de clase.

Tampoco me genera emotividad mis recuerdos de adolescencia, el temor de experimentar vivencias sociales, abrazos, besos, caminar por un parque me costaban demasiado, que importante es el salir, disfrutar, hacer planes. Hoy si bien disfruto abrazar, me cuestan los abrazos largos, son incómodos, son eternos....aún me cuesta que me escuchen hablando por celular de forma amorosa, cambio el tono, cambio la forma.

Y creo que parte de esa inseguridad sigue latente, un temor al riesgo, que finalmente te pudre en la conformidad, en la zona de confort, en la lealtad a los mas desleales...Definitivamente es importante salir...abrazar...bailar...cantar....dar un giro.